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martes, 8 de febrero de 2011

Amantes de los libros. Un diseñador: Vicente Rojo

Por: Alejandra Guerrero Esperón


En el gremio del diseño en Mexico decir que se admira el trabajo de Vicente Rojo suele ser un lugar común, incluso resulta difícil pensar en un diseñador más emblemático de la cultura visual de nuestro país; su trayectoria profesional es conocida por un amplísimo número de diseñadores que respetan y valoran su capacidad creadora no solo en diseño, también en el terreno de la pintura, la escultura y la gráfica. Quienes se han interesado en su labor saben de su origen español, de su temprana y continua formación artística, de su llegada a México en 1949 con 17 años de edad, de su colaboración con Miguel Prieto —quien fuera su gran maestro— en la Oficina de Ediciones del INBA, de su trabajo en los Suplementos México en la Cultura del diario Novedades y La Cultura en México de la revista Siempre, también de su participación —ya sea como diseñador, director artístico, colaborador editorial o fundador— en diversas revistas culturales: Revista de la Universidad de México, Artes de México, México en el Arte, Artes Visuales, Revista de Bellas Artes, Vuelta y Plural, entre otras; se conoce la riqueza y diversidad de su trabajo de difusión cultural para la Universidad Nacional Autónoma de México, para Conaculta, para museos y galerías, además de su destacada labor en la dirección artística de Imprenta Madero, de su trabajo para diversas editoriales como Fondo de Cultura Económica, Joaquín Mortiz, Salvat, etc., de la cofundación de empresas editoriales de gran trascendencia como Ediciones Era (que en 2010 cumpló 50 años) y el periódico La Jornada.

Su trabajo de diseño y su obra artística son bastísimos y ambos han merecido ser expuestos en importantes espacios culturales y museos alrededor del mundo con exposiciones retrospectivas (Museo Universitario de Ciencias y Artes, Museo de Arte Carrillo Gil, Museo de Arte Moderno y Klingspor Museum de Francfort) y diversas muestras de sus series: Señales, Negaciones, Recuerdos, México bajo la lluvia, Escenarios y Escrituras. Rojo ha recibido el Premio Nacional de Arte, los premios México de Diseño y el de Excelencia en Diseño. Ha sido designado creador emérito por el Sistema Nacional de Creadores de Arte, es miembro del Colegio Nacional desde 1994 y recibió el Doctorado Honoris Causa por la Universidad Nacional Autónoma de México en 1998.

Por si todo lo anterior fuera poco, Vicente Rojo además de ser un gran diseñador y artista, es un amante de los libros ejemplar. Su vida ha transcurrido rodeada, enriquecida e influida por ellos en todas las formas en que es posible: papel y tinta, letras impresas y letras dibujadas, alfabetos escultóricos y escrituras imaginarias, palabras e imágenes, colores y texturas; libros escritos, libros diseñados, libros de artista, libros objeto, libros personales y libros colaborativos, libros diálogo (entre Rojo y personalidades de la talla de Octavio Paz, José Emilio Pacheco, David Huerta, Álvaro Mutis, Fernando del Paso, Alberto Blanco, Hugo Hiriart, Juan Villoro, entre otros), lecturas personales y lecturas compartidas con las personas que lo han rodeado toda su vida: intelectuales, escritores, editores, poetas, narradores, artistas, diseñadores, tipógrafos, impresores; en suma, toda clase de creadores, de mentes destacadas e inteligencias sensibles que evidentemente han dejado una impronta no solo en la obra, sino en la propia persona de Rojo.

Aunque él mismo asegura haber dejado de ejercer el diseño desde hace más de quince años, en su producción resulta difícil distinguir dónde termina el diseñador y comienza el artista, tal parece que ambas facetas se han enriquecido, confrontado y aveces hasta fusionado en el tiempo.

Por fortuna este hombre de infatigable aliento sigue activo y recientemente hemos podido apreciar la primera parte de su alfabeto primitivo, una serie de 26 esculturas que forman parte de la serie Escrituras, y que una vez más confirman su amor por las letras y las palabras en romance con el arte. A finales de 2010 se ha publicado Puntos suspensivos: escenas de un autorretrato, el libro monográfico que hacía falta sobre la imprescindible obra de Rojo y como una cereza en el pastel Jaque mate, libro publicado por Taller Ditoria es un pequeño volumen en el que Vicente Rojo dialoga gráficamente con las palabras y las preguntas que Roberto Rébora y Marco Perilli (los editores) le sugieren; el resultado es además de la sublime reiteración de su talento, una delicia visual y sensorial como solo él sabe provocar.

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